El tratamiento de la hiponatremia consiste en restringir la ingesta de agua y estimular
su eliminación, en reponer las deficiencias de sodio y en solucionar la causa
que la provoca.
En el caso de la hipernatremia, la reposición controlada de agua será la conducta a
seguir que, en el caso de no ofrecer una respuesta adecuada, obligar a ampliar
el estudio a fin de detectar otras causas diferentes de la ingesta insuficiente
de agua.