Los corticoesteroides administrados mediante aerosol en
las fosas nasales pueden reducir o eliminar los pólipos.
En muchos casos es necesaria la extirpación quirúrgica.
Los pólipos que obstruyen las vías respiratorias y provocan sinusitis se extirpan,
así como los pólipos unilaterales que pueden ocultar tumores
benignos o malignos.
Sin embargo, los pólipos tienden a recidivar a menos que se
controle la alergia o la infección subyacente.
Tras la extirpación de los pólipos nasales, el tratamiento tópico
con beclometasona o flunisolida tiende a retrasar la recidiva.
En casos recidivantes graves, puede estar indicada la sinusotomía maxilar
o la etmoidectomía. Normalmente, estos procedimientos se realizan por endoscopia.