Si a los cinco años el problema no se ha corregido, el tratamiento habitual es la circuncisión.
Estirar el prepucio suavemente con dos dedos con cuidado para no producir parafimosis.
A menudo, la aplicación de crema de betametasona al 0,05% durante 3 meses en la punta del prepucio y la zona adyacente al glande es eficaz en la inflamación.
La circuncisión es la opción quirúrgica para la fimosis.
En la parafimosis, la compresión circunferencial firme del glande con la mano puede aliviar el edema lo suficientemente como para permitir que el prepucio vuelva a su posición normal. Si esta técnica es ineficaz, una incisión dorsal con un anestésico local alivia temporalmente la afección. A continuación, cuando se ha resuelto el edema se realiza la circuncisión.