El sangrado atípico
o excesivo puede producirse con diferentes signos y síntomas. Los pacientes
pueden presentar hemorragias nasales o epistaxis, hemorragias excesivas inexplicables, hemorragia
menstrual prolongada o menorragia, hemorragia después de cortes
menores, hemorragia en los dientes por cepillado o limpieza con hilo dental
o hemorragia con un traumatismo mínimo. Los enfermos
críticos pueden sangrar de repente tras una punción vascular.