La demencia es el deterioro de la cognición a nivel global. Su inicio es gradual,
los miembros de la familia pueden notar de repente algún déficit.
A menudo, la demencia comporta la pérdida de memoria a corto plazo o es el primer
signo, aunque los síntomas se presentan en un proceso continuo.
En función del tipo de demencia, se produce deterioro motor y otras deficiencias neurológicas
focales en diferentes etapas. La incidencia de las convulsiones se incrementa
durante todas las etapas y también se dan psicosis, alucinaciones,
delirios o paranoia.