ENFERMEDAD
FASCITIS PLANTAR (ESPOLÓN CALCÁNEO)
La fascitis plantar es el dolor en el punto de inserción de la fascia plantar y el calcáneo, con o sin dolor asociado a lo largo de la zona medial de la fascia plantar. El diagnóstico es principalmente clínico.
Los síndromes de dolor en la fascia plantar se denominan fascitis plantar; sin embargo, dado que habitualmente no hay inflamación, fasciosis plantar es más correcto. Otros términos utilizados comprenden entesopatía del calcáneo o síndrome del espolón calcáneo.
La fasciosis plantar puede ser aguda (por estiramiento) o crónica (por degeneración de la fascia en su punto de inserción). Puede observarse o no un espolón en el mismo proceso.
Las causas reconocidas comprenden el acortamiento o la contractura de los músculos de la pantorrilla y la fascia plantar. Los factores de riesgo de acortamiento comprenden un estilo de vida sedentario, profesiones que requieren estar sentado con los pies muy altos o bajos, y el uso de calzado de tacón muy alto.
El trastorno también es frecuente entre los corredores y los bailarines y puede darse en personas cuyas profesiones implican estar de pie o caminar sobre superficies duras durante períodos prolongados.
Los trastornos que pueden estar asociados a la fasciosis plantar son: obesidad, artritis reumatoide, artritis reactiva y artritis psoriásica. Las inyecciones múltiples de corticoesteroides pueden provocar alteraciones degenerativas de la fascia y una posible pérdida de amortiguación de la almohadilla de grasa protectora plantar.
SÍNTOMAS
FASCITIS PLANTAR (ESPOLÓN CALCÁNEO)
El dolor plantar en la parte posterior del talón aumenta al apoyar el pie, particularmente al
dar los primeros pasos por la mañana. Generalmente, el dolor mejora al deambular, pero reaparece más tarde. Algunos pacientes describen ardor o dolor al caminar apoyando el borde interno y
plantar del pie.
DIAGNÓSTICO
FASCITIS PLANTAR (ESPOLÓN CALCÁNEO)
El diagnóstico de fascitis plantar, tendinitis o espolón calcáneo
es básicamente clínico, aunque puede ser necesaria una ecografía para
diferenciar una tendinitis de la fascitis, así como una radiografía del
espolón calcáneo.
TRATAMIENTO
FASCITIS PLANTAR (ESPOLÓN CALCÁNEO)
Los tratamientos más eficaces comprenden el uso de tacón en el zapato, con ejercicios de estiramiento de la pantorrilla y la fascia plantar.
Las ortesis (plantillas) prefabricadas o a medida también pueden aliviar la tensión aponeurótica y sus síntomas.
Otros tratamientos pueden comprender modificaciones de la actividad, AINE, pérdida de peso en pacientes obesos, frío con hielo, tratamiento con masajes e inyecciones de corticoesteroides ocasionales. Sin embargo, dado que las inyecciones de corticoesteroides pueden predisponer a fasciosis plantar, muchos médicos limitan el uso de estas inyecciones.
El tratamiento va dirigido a solucionar la tendinitis insercional o la fascitis plantar. Si se observa un espolón calcáneo y el dolor está muy localizado, se inicia tratamiento con plantillas de descarga a medida o, si el dolor es muy incapacitante, se administra una infiltración, pero si esto no es suficiente, o el dolor es crónico, existen fisioterapias mediante ondas de choque focalizadas (ESWT, en sus siglas en inglés) que pueden solucionar la patología.
Si es dolor es más fascial que insercional y tampoco se soluciona con plantillas de descarga, los láseres específicos pueden mejorar el dolor y la inflamación de manera notable.
De vez en cuando, la cirugía puede ser resolutiva y consiste en la desinserción de las fibras que se insertan en el calcáneo.